Una semana con el iPad Mini
Una semana con el iPad Mini
Durante la última semana en El Mundo hemos tenido acceso a una unidad de prueba del nuevo iPad Mini. La tableta de Apple sale a la venta el próximo viernes a un precio de 329 euros para el modelo básico, con 16 GB de memoria y conexión WiFi. Como el resto de los iPad está disponible también con mayor capacidad y con acceso a redes 3G.
Es el iPad más barato de la compañía de la manzana pero llega a un mercado, el de las tabletas de pequeño tamaño, donde la competencia es mucho más agresiva. Google, por ejemplo, acaba de rebajar su tableta con 16 GB de memoria, la Nexus 7, a 199 euros.
Es casi obligatorio mencionar a Google porque es sin duda el competidor natural de este pequeño iPad. La propia Apple comparó ambos dispositivos sobre el escenario durante la presentación de la semana pasada. Ambas tabletas son pequeñas y ligeras y están pensadas para sujetar con una sola mano. Como señalé en mi reseña del Nexus 7 hace unos meses esta es sin duda, junto al precio, una de las mayores ventajas que tenía la tableta de Google hasta ahora. El iPad convencional, para algunos usuarios y en algunas situaciones, puede ser demasiado grande o pesado.
El iPad Mini lo soluciona. Es una tableta con una potencia comparable a la del iPad 2, que aún está a la venta a un precio de 399 euros, pero reducida a un formato mucho más cómodo de llevar, por ejemplo, en un bolso. La pantalla tiene la misma resolución, 1024 x 768 pixeles, y la misma proporción 4:3. En mi experiencia diaria esta proporción resulta mucho más atractiva a la hora de leer páginas web, libros y revistas, mientras que las pantallas 16:9, por lo general, tienden a destacar a la hora de reproducir vídeo.
Los bordes del marco del iPad Mini son algo más delgados pero se puede sostener el dispositivo con una sola mano desde un lateral, como en la foto que acompaña a esta entrada. El sistema operativo detecta que el pulgar está en "reposo" y no tiene en cuenta la presión sobre la pantalla.
El tamaño de la pantalla del iPad es de 7,9 pulgadas. Son 0,9 pulgadas más que la pantalla de Nexus 7. Parece poco pero las pantallas se miden en diagonal y como he señalado antes estas tabletas tienen proporciones diferentes. En 4:3, una pantalla de 7,9 pulgadas ofrece casi un 40% más de superficie de pantalla que una tableta de siete pulgadas en formato 16:9. Se nota, y con más espacio navegar por una web, por ejemplo, o leer un libro resulta mucho más cómodo.
El iPad Mini, sin embargo, tiene algo menos resolución que el modelo de Google, que presume de 1280 x 800 pixeles en sus siete pulgadas de pantalla. Eso quiere decir que la nitidez es mayor. La pantalla de este iPad, aunque es más densa que la del iPad 2, está lejos de la calidad de la pantalla "Retina" que ofrece el iPad actual. Acostumbrado a leer en este tipo de pantallas durante los últimos meses -mi tableta personal es un iPad con pantalla "Retina"- es fácil notar la resolución mucho más baja en textos y fotografías. La pantalla del iPad Mini tiene una calidad en color y brillo muy parecida a la de los nuevos modelos, en cualquier caso.
Al igual que el iPad 2, el iPad Mini tiene dos cámaras (una frontal y una trasera) pero estas cámaras son mucho mejores. La frontal, fundamentalmente una cámara para videoconferencia, graba vídeo en alta definición. La trasera tiene cinco megapíxeles y una lente con apertura equivalente a f/2.4. Sacar fotografías con una tableta del tamaño de un iPad no es nada cómodo pero aún así, no me pregunten por qué, me encuentro a menudo con bastantes usuarios que lo hacen. El iPad Mini es algo más discreto y cómodo de manejar para este uso.
Apple estima la autonomía del iPad Mini en 10 horas pero es complicado medir el uso típico de una tableta. Mi experiencia es que bajo una carga de trabajo contínua normal -vídeo y web bajo WiFi- la cifra es bastante aproximada, de más de nueve horas de uso.
Hay tres detalles que hacen al iPad Mini destacar frente a otros modelos de tabletas de pequeño tamaño. El primero es que a pesar de usar una pantalla más grande es mucho más ligero. Tiene un peso de sólo 308 gramos. Nexus 7, en cambio, pesa 340 gramos. El segundo es que la calidad de construcción y los materiales utilizados son mucho mejores. Tiene una carcasa de aluminio y un diseño mucho más estilizado, parecido al del nuevo iPhone, por ejemplo, en la unión entre la pantalla y la carcasa. Es un prodcuto mucho más cuidado y elegante.
Tercero, y tal vez más importante, es que Apple tiene por ahora muchas más aplicaciones creadas específicamente para aprovechar la pantalla de la tableta y un catálogo de juegos y programas mucho más extenso. Google está tratando de convencer a los desarrolladores para que presten más atención al mercado de las tabletas y no confíen únicamente en escalar las aplicaciones creadas para teléfonos móviles pero por ahora muchas de las apps disponibles para Nexus 7 resultan menos atractivas que su contrapartida para iPad.
Mi opinión es que si la idea es comprar una tableta pequeña para navegar por la red y el precio es determinante, Nexus 7 es más económica y a pesar de tener una pantalla más pequeña y en formato 16:9, es suficiente.
El iPad Mini utiliza el mismo procesador que el iPad 2 y es algo menos potente que la tableta de Google pero en general la experiencia de iOS suele ser más fluida así que a la hora de hacer la suma ambas tabletas se mueven con una soltura equivalente.
Pero si la idea es aprovechar la tableta para algo más, para juegos y aplicaciones, el catálogo de iPad resulta mucho más atractivo y la mayor pantalla y la mejor cámara se agradecen practicamente en todas las situaciones.
Aquí, sin embargo, es donde mi experiencia personal posiblemente sea diferente de la de otros usuarios. En mi opinión compensa invertir 170 euros más a cambio de tener la pantalla de mayor tamaño y, mucho más importante, mayor resolución. Yo uso el iPad por lo general en casa, en el sofá o en la cama, y no encuentro que sea muy pesada o incómoda en estas circunstancias. Si el iPad Mini hubiese apostado por una pantalla "retina", con cuatro veces más resolución, la decisión sin duda sería más difícil. El iPad, condensado, también resulta muy tentador.
Comentarios