ía libre en EE UU para los Estados que regulan la marihuana recreativa El Departamento de Justicia asegura que no se opondrá a las legislaciones estatales que han legislado sobre el uso recreativo o medicinal del cannabis DESCARGABLE Memorandum sobre marihuana del Departamento de Justicia Eva Saiz Washington 29 AGO 2013 - 21:58 CET39 Archivado en: Marihuana Legalización Consumo droga Lucha antidroga Washington Colorado Drogas Estados Unidos Delitos salud pública Problemas sociales Norteamérica Delitos América Derecho Sociedad Justicia Un establecimiento de venta de marihuana medicinal en Los Ángeles, California. / Patrick T. Fallon (Bloomberg) Recomendar en Facebook 962 Twittear 318 Enviar a LinkedIn 3 Enviar a Tuenti Enviar a Menéame Enviar a Eskup Enviar Imprimir Guardar El Gobierno federal de Estados Unidos no se opondrá a la legislación de aquellos Estados que regulan el uso medicinal y recreativo de la marihuana, siempre y cuando no contravengan las nuevas prioridades en la persecución de la posesión, tenencia y tráfico de esta droga que este jueves ha hecho públicas el Departamento de Justicia. La decisión confirma el cambio de estrategia en la lucha contra las drogas por la que ha optado la Administración Obama, más centrada en las políticas de prevención y salud que en la persecución de los consumidores. La nueva política en relación con la persecución de la marihuana, que este jueves se ha distribuido a todos los fiscales federales del país, hace hincapié en impedir su venta a menores o la adquisición por parte de cárteles y bandas pertenecientes al crimen organizado y en prevenir que la marihuana cuya venta está regulada para usos medicinales o recreativos se distribuya en Estados en las que esa actividad está prohibida. La decisión confirma el cambio de estrategia en la lucha contra las drogas por la que ha optado la Administración Obama, más centrada en las políticas de prevención y salud que en la persecución de los consumidores El fiscal general, Eric Holder, ha transmitido directamente la nueva postura de su departamento a los gobernadores de Washington y Colorado, los dos únicos Estados del país que han legalizado el consumo, la distribución, la venta y la tributación de la marihuana para uso recreativo. La indefinición de la Administración había inquietado a los responsables de estos dos Estados que dudaban de que el Gobierno permitiera la puesta en práctica de una regulación opuesta frontalmente a la normativa federal para la que la marihuana es una sustancia prohibida equiparada al LSD o la heroína. En el caso de los Estados en los que es legal el uso y la venta de cannabis para fines medicinales -18 más el Distrito de Columbia-, la Administración también había dado instrucciones a los fiscales federales de no perseguir el consumo, pero, en muchos lugares las redadas contra establecimientos autorizados, ante la sospecha de que eran tapaderas para el contrabando ilícito de hachís, o las amenazas a los agentes estatales y locales que cumplían con las leyes de sus Estados, no habían disminuido. “La Administración central no puede obligar a los Estados a castigar una conducta solo por el hecho de que sea considerada ilegal por la legislación federal si de acuerdo con la estatal es legítima”, comenta Robert Mikos, profesor de Derecho de la universidad de Vandelbilt y experto en la legislación sobre marihuana. Pese a ello, el propio presidente de EE UU, Barack Obama, y varios legisladores han demandado la necesidad de conciliar la legislación federal y la estatal. “Necesitamos tener un debate sobre cómo armonizar una ley central que dice que la marihuana es un delito federal y otra estatal que la considera legal”, señaló el presidente a la periodista Barbara Walters en diciembre del año pasado. La nueva política en relación con la persecución de la marihuana hace hincapié en impedir su venta a menores o la adquisición por parte de cárteles Esa entrevista fue la primera vez en la que Obama se pronunciaba sobre la legalización de la marihuana para fines recreativos aprobada por los ciudadanos de Washington y Colorado el 6 de noviembre de 2012. Entonces, también sostuvo que para su Administración “no era prioritario perseguir a los consumidores de marihuana para fines recreativos de aquellos Estados que han decidido que su posesión es legal”. El presidente fue claro entonces, pero el Fiscal General ha guardado silencio a lo largo de estos 10 meses. El memorándum con las nuevas ocho prioridades supone una declaración de intenciones por parte del Departamento de Justicia que hace varios años que aboga por terminar con la “guerra” contra las drogas y abordar el asunto no desde el punto de vista de la seguridad sino desde el sanitario. Esas ocho prioridades serán las que constituyan su base argumental cuando el próximo 6 de septiembre declare, junto a su número dos, James Cole, ante el comité de Asuntos Jurídicos del Senado, para explicar, en palabras de su presidente, el demócrata Patrick Leahy, “la mejor forma de usar los recursos federales para perseguir el uso recreativo y medicinal de la marihuana en aquellos Estados donde éste es legal”. Colorado ya ha aprobado la regulación del mercado de la marihuana recreativa y Washington espera hacerlo antes de que finalice este año. Ambos han legislado sobre su consumo. El país mira con lupa los problemas normativos, las trabas y las consecuencias sociales y sanitarias de una normativa pionera. Rhode Island y Maine esperan aprobar leyes similares en 2013 y Vermont, Masachusetts, California y Oregón podrían incluir referéndums al respecto en las próximas elecciones legislativas de 2014. NOTICIAS RELACIONADAS Selección de temas realizada automáticamente con EN EL PAÍS Ver todas » Aprobada en EE.UU. la igualdad fiscal de los matrimonios homosexuales Un informe exagera sobre la actividad de los cárteles mexicanos en Estados Unidos EE UU vira hacia un enfoque más sanitario de la lucha antidroga “Vamos en ruta de regular no solo la marihuana, sino todas las drogas”

ía libre en EE UU para los Estados que regulan la marihuana recreativa

El Departamento de Justicia asegura que no se opondrá a las legislaciones estatales que han legislado sobre el uso recreativo o medicinal del cannabis

Un establecimiento de venta de marihuana medicinal en Los Ángeles, California. / Patrick T. Fallon (Bloomberg)
El Gobierno federal de Estados Unidos no se opondrá a la legislación de aquellos Estados que regulan el uso medicinal y recreativo de la marihuana, siempre y cuando no contravengan las nuevas prioridades en la persecución de la posesión, tenencia y tráfico de esta droga que este jueves ha hecho públicas el Departamento de Justicia. La decisión confirma el cambio de estrategia en la lucha contra las drogas por la que ha optado la Administración Obama, más centrada en las políticas de prevención y salud que en la persecución de los consumidores.
La nueva política en relación con la persecución de la marihuana, que este jueves se ha distribuido a todos los fiscales federales del país, hace hincapié en impedir su venta a menores o la adquisición por parte de cárteles y bandas pertenecientes al crimen organizado y en prevenir que la marihuana cuya venta está regulada para usos medicinales o recreativos se distribuya en Estados en las que esa actividad está prohibida.
La decisión confirma el cambio de estrategia en la lucha contra las drogas por la que ha optado la Administración Obama, más centrada en las políticas de prevención y salud que en la persecución de los consumidores
El fiscal general, Eric Holder, ha transmitido directamente la nueva postura de su departamento a los gobernadores de Washington y Colorado, los dos únicos Estados del país que han legalizado el consumo, la distribución, la venta y la tributación de la marihuana para uso recreativo. La indefinición de la Administración había inquietado a los responsables de estos dos Estados que dudaban de que el Gobierno permitiera la puesta en práctica de una regulación opuesta frontalmente a la normativa federal para la que la marihuana es una sustancia prohibida equiparada al LSD o la heroína.
En el caso de los Estados en los que es legal el uso y la venta de cannabis para fines medicinales -18 más el Distrito de Columbia-, la Administración también había dado instrucciones a los fiscales federales de no perseguir el consumo, pero, en muchos lugares las redadas contra establecimientos autorizados, ante la sospecha de que eran tapaderas para el contrabando ilícito de hachís, o las amenazas a los agentes estatales y locales que cumplían con las leyes de sus Estados, no habían disminuido.
“La Administración central no puede obligar a los Estados a castigar una conducta solo por el hecho de que sea considerada ilegal por la legislación federal si de acuerdo con la estatal es legítima”, comenta Robert Mikos, profesor de Derecho de la universidad de Vandelbilt y experto en la legislación sobre marihuana. Pese a ello, el propio presidente de EE UU, Barack Obama, y varios legisladores han demandado la necesidad de conciliar la legislación federal y la estatal. “Necesitamos tener un debate sobre cómo armonizar una ley central que dice que la marihuana es un delito federal y otra estatal que la considera legal”, señaló el presidente a la periodista Barbara Walters en diciembre del año pasado.
La nueva política en relación con la persecución de la marihuana hace hincapié en impedir su venta a menores o la adquisición por parte de cárteles
Esa entrevista fue la primera vez en la que Obama se pronunciaba sobre la legalización de la marihuana para fines recreativos aprobada por los ciudadanos de Washington y Colorado el 6 de noviembre de 2012. Entonces, también sostuvo que para su Administración “no era prioritario perseguir a los consumidores de marihuana para fines recreativos de aquellos Estados que han decidido que su posesión es legal”.
El presidente fue claro entonces, pero el Fiscal General ha guardado silencio a lo largo de estos 10 meses. El memorándum con las nuevas ocho prioridades supone una declaración de intenciones por parte del Departamento de Justicia que hace varios años que aboga por terminar con la “guerra” contra las drogas y abordar el asunto no desde el punto de vista de la seguridad sino desde el sanitario. Esas ocho prioridades serán las que constituyan su base argumental cuando el próximo 6 de septiembre declare, junto a su número dos, James Cole, ante el comité de Asuntos Jurídicos del Senado, para explicar, en palabras de su presidente, el demócrata Patrick Leahy, “la mejor forma de usar los recursos federales para perseguir el uso recreativo y medicinal de la marihuana en aquellos Estados donde éste es legal”.
Colorado ya ha aprobado la regulación del mercado de la marihuana recreativa y Washington espera hacerlo antes de que finalice este año. Ambos han legislado sobre su consumo. El país mira con lupa los problemas normativos, las trabas y las consecuencias sociales y sanitarias de una normativa pionera. Rhode Island y Maine esperan aprobar leyes similares en 2013 y Vermont, Masachusetts, California y Oregón podrían incluir referéndums al respecto en las próximas elecciones legislativas de 2014.

Comentarios

Entradas populares

¡Más agua! Pide Primera Dama Michelle Obama se suma a una campaña nacional que promueve entre los estadounidenses tomar agua con mayor frecuencia en beneficio de la salud. Imprimir Comentarios Compartir: La primera Dama Michelle Obama participa de un evento para animar a la gente a beber más agua, en la escuela secundaria Watertown en Wisconsin. La primera Dama Michelle Obama participa de un evento para animar a la gente a beber más agua, en la escuela secundaria Watertown en Wisconsin. Pin It Artículos relacionados Música latina en la Casa Blanca La Casa Blanca da la bienvenida a artistas hispanos este lunes como parte de las celebraciones por el Mes de la Herencia Hispana que se inicia el 15 de septiembre. Michelle Obama: "No se den por vencidos" La primera dama, Michelle Obama sostuvo un discurso político atípico para su figura, en donde habló sobre la reforma migratoria. TAMAÑO DEL TEXTO Voz de América - Redacción Última actualización hecha el: 13.09.2013 07:37 La primera dama de EE.UU., Michelle Obama, se unió a más de una docena de organizaciones que respaldan la Asociación para un EE.UU. más Saludable (PHA) a fin de alentar a todos los estadounidenses a beber agua con mayor frecuencia como fácil elección para mejorar su salud. La campaña denominada Drink Up (A tomar), a la que se ha sumado además la actriz hispana Eva Longoria, complementa los esfuerzos ya desarrollados por la primera dama en pro de la salud nacional con la iniciativa Let´s Move, dirigida a combatir la obesidad infantil. Desde que dio inicio esa iniciativa, dijo Michelle Obama, “me he dado cuenta de que si vamos a dar un paso para mejorar nuestra salud y la de nuestras familias probablemente la cosa más simple que podríamos hacer es sencillamente beber más agua”. De acuerdo con Longoria, “mucha gente quiere vivir más saludablemente pero la vida se complica y a veces adoptar la decisión más saludable puede ser difícil. Tomar más agua es una fácil y simple elección que la mayoría de la gente puede hacer a diario”. Según los Centros para el Control de Enfermedades alrededor de una cuarta parte de los niños del país no beben suficiente agua. Para recordar a las familias la importancia de beber agua, quienes apoyan los esfuerzos de la PHA portarán el logo de Drink Up en casi 300 millones de paquetes de agua embotellada, y más de 500 millones de botellas, entre otras medidas, el año próximo. Los gobiernos de ciudades utilizarán el logo en edificios, autobuses, paradas y otros sitios para instar a las personas a beber más agua, y una docena de programas de TV promoverán la campaña entre su teleaudiencia.